La detección de GIP para el monitoreo de la adherencia a la Dieta Sin Gluten es una buena ayuda, pero, por desgracia, su práctica sigue siendo poco habitual”. – Luis Rodrigo Saéz

Hemos tenido la oportunidad de hablar sobre celiaquía con el Dr. Luis Rodrigo, Médico Digestivo especialista en Celiaquía, Catedrático Emérito de la Universidad de Oviedo y miembro de la Sociedad Española de Enfermedad Celíaca. En esta entrevista, el Dr. Luis Rodrigo nos ha hablado de la incidencia creciente de esta enfermedad, de los síntomas característicos en niños y adultos, así como de la utilidad clínica de la detección de GIP en pacientes celíacos. Os dejamos por aquí las preguntas que le realizamos sobre la Enfermedad celíaca… 

Luis Rodrigo Sáez, ¿cómo comenzó el vínculo entre su trayectoria profesional y la Enfermedad Celíaca?

“Hace unos 25 años aproximadamente, me di cuenta de que había muchos casos de pacientes que acudían a la consulta siendo etiquetados previamente de otros diagnósticos, tales como síndrome de colon irritable, gastritis crónica, reflujo gastroesofágico, que realmente eran celiacos”.

¿Están aumentando los casos de celiaquía? ¿Por qué la celiaquía es una enfermedad tan difícil de diagnosticar?

“Está claro que cada vez se diagnostican más casos, probablemente porque nos hemos dado cuenta los especialistas de digestivo en generalmente, que esta enfermedad es mucho más frecuente de lo que se pensaba previamente. No es tan difícil de diagnosticar como se piensa. Solo hay que buscarla y con un poco de experiencia, se identifica con relativa facilidad”.

¿Cuáles son los principales síntomas de la Enfermedad Celíaca en niños? ¿Cómo afecta a su crecimiento? ¿Y en adultos?

“Los síntomas son muy parecidos en niños y adultos. Consisten en digestiones lentas y pesadas, acompañadas de distensión abdominal con abundantes gases, síntomas de reflujo, dolor abdominal y alteración del hábito intestinal, tanto en forma de diarrea como de estreñimiento. En los niños puede afectar bastante y en los adultos poco o nada, pues solo se crecen la adolescencia”.

¿En celíacos, qué consecuencias tienen las pequeñas ingestas inadvertidas de gluten, cuando se repiten?

“Pues depende de la cantidad de gluten que se ingieran. Siempre resultan molestas, ya que en la mayor parte de los casos se acompañan de una reproducción de los síntomas previos, por lo que hay que tratar de evitarlas siempre”.

¿Qué seguimiento hay que realizar a un paciente celiaco una vez diagnosticado?

“Conviene hacer un seguimiento al menos anual incluyendo una visita al especialista, para comprobar si todo sigue bien o han aparecido nuevos síntomas. Todo ello debe ir acompañado de una analítica amplia y un control dietético adecuado”.

Los últimos resultados han demostrado que, la mayoría de los pacientes que consumen gluten y presentan atrofia vellositaria, tienen como resultado una serología negativa, ¿qué consecuencia tendría en la práctica clínica? ¿Cómo se podrían corregir estos falsos negativos?

“La serología suele ser negativa cuando no existe una atrofia vellositaria, ya que hay un paralelismo entre la positividad de la serología y la presencia de atrofia de las vellosidades por lo general”.

¿Qué opina de la detección de GIP para el monitoreo de la adherencia a la Dieta Sin Gluten? ¿Cómo de útil vería un test, basado en la detección de GIP, que el paciente celíaco pudiese realizarse en casa?

“Está muy bien es una buena ayuda, pero por desgracia su práctica sigue siendo poco habitual”.

 

Por último, nos gustaría agradecerle su predisposición y colaboración al Dr.Luis Rodrigo Saéz. ¡Muchas gracias!